Un mundo de cenizas

Sosteniendo mi último aliento, a salvo en mi interior,¿son todos mis pensamientos sobre tí? Dulce luz extaciante, muere aquí esta noche. Extrañaré el invierno un mundo de cosas frágiles, buscame en el bosque blanco, escondíendome en un árbol vacío, se que me escuchas lo siento en tus lágrimas. Todo el pasado se ha vuelto cenizas, cenizas de hermosos momentos, de ilusiones muertas, las sombras invaden mi alma, el silencio es mi eterno compañero, trato de hablar pero no pueden escucharme, mi voz es apenas un susurro, a veces siento que llueve, y sin darme cuenta son mis lágrimas que caen, mojando de dolor mi casí inexistente corazón, el mismo que un día estuvo lleno de sentimientos y que fuerón muriendo poco a poco con cada desilución, hoy recorro los caminos por un sendero al que llaman vida. Solo y en la mas grande soledad, ¿quién marco este destino? ¿hacía adondé voy? llevo a cuestas muchas derrotas, las que han marcado la vereda que mi vida ha de seguir hasta encontrar el final de multiples desaciertos, una vez mas muere la cordura para entrar por la puerta de lo eterno, de la fantasía, de lo pasado. Es curioso como lo que en otros tiempos alzo nuestras voces, hoy nos lleva a caminar por lúgubres senderos, donde la brisa nos abate, nuestras penas se suman a nuestros fracasos sin hallar salida a este mundo de sombras, en el que ni siquiera el reflejo de quien fuimos parece mantenernos a salvo. Nuevamente un deleite el leerte Esmeralda