Te esperaré 20 años en el futuro amor de mi vida

No te diré adiós, porque estás ausente, sería como querer abrazar al viento, como susurrarle al  silencio, o escuchar sin oír; me he dado cuenta lo grande que ha sido tu presencia en mi vida, no por lo que me diste, sino por todo lo que has despertado en mí, me has hecho soñar, pusiste el cielo en mis manos, ese ángel que tanto amo, es producto de esa proximidad, la extraño tanto,

pero me reconforta saber que ese hermoso ángel vivirá en mi mente aún y después de que me haya ido, porque el verdadero amor es una fuente inagotable de energía , y siempre será así, es algo que va más allá de lo puramente espiritual. 

He decidido dejarte mi corazón aunque ya no lo quieras, eso ya no importa, tú me has hecho tan feliz, que mereces eso y mucho más, te he de recordar como el primer día en el cual el destino nos puso frente a frente.

Fue algo tan lindo, tan puro, lo más maravilloso que ha existido en mi vida, así que, aunque ya no me ames, yo lo sigo haciendo, es increíble como un recuerdo nos puede dar calor en el invierno de nuestras vidas, en la lejanía de un sentimiento, mismo que te regalé y que mantendrá encendida la luz del amor en mi alma.

No importa que no vuelvas, tal vez dentro de 20 años, si Dios así lo quiere, nos volvamos a encontrar, verás que el tiempo se habrá llevado todo rencor, todo resentimiento  y te volveré a ver sonreír, aunque ya físicamente no seamos los mismos.

Te estaré esperando en ese parque que tantos recuerdos me trae, en la Leona, el 23 de octubre del año 2032, si, el día de tú cumpleaños, si no llegará a ésta cita que hoy pacto contigo, será porque ya no estaré en este mundo, entonces será en otro sitio donde te he de esperar con los brazos abiertos, no me odiarás eternamente, eso lo sé porque lo he vivido. Con todo el amor del universo.... te esperaré…aguardaré con ansias ese día, y sé que en el ocaso de mi vida he de volver a verte mi amada Laurita, mi única hija, el ángel más amado, aunque con ello llegue mi fin. Te esperaré no lo olvides nunca, aunque ya nuestro tiempo haya pasado será un verdadero regalo del cielo el mirarlas una última vez.

Con todo el amor del mundo y del universo esperaré ese día… hasta entonces mis dos grandes amores…  las extrañaré todos estos años.

Oscar